Dábamos información dos entradas abajo al respecto de que la corrida de Ramón Carreño, la anunciada en los carteles para la XXXIX corrida de Asprona, fue rechazada en el primer reconocimiento por parte del presidente, Luis Cuesta, por falta de trapío y, en algunos casos, hasta de peso. Asprona, que en esta ocasión actúa como empresa taurina, había ordenado el envío de toros del hierro de Fernando Peña Catalán.
Inicialmente se creyó que se podría sacar la corrida de este segundo envío pero los diez toros de Peña no han sido suficientes para conjuntar el encierro. De momento sólo hay cinco toros aprobados en los primeros reconocimientos. También hay algún toro declarado “no apto” a la espera de la evolución que pueda experimentar en las próximas horas, pues todavía podría estar bajo los efectos del estrés del transporte.
Así las cosas, y ante la necesidad de toros para que no peligrara la celebración de la corrida (faltarían, al menos, otros dos), Asprona ha vuelto a pedir el envío de reses, en este caso de la ganadería de “El Torero”. Cuatro toros de este hierro serán examinados por el presidente y los veterinarios a primera hora de mañana domingo para cerrar la corrida definitivamente, que comenzará a las seis y media de la tarde si estas eventualidades son solventadas.
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